Crónica de las LES 2012

Este fin de semana han sido las V jornadas solidarias Ludo Ergo Sum y Aker Codicem y, como no podía ser de otro modo, fuí de cabeza. La verdad es que era la primera vez que iba a unas LES y las primeras jornadas a las que he ido en bastante tiempo, así que hice doblete el sábado y el domingo y, visto lo visto, el año que viene van a volver a verme.

Todo empieza el viernes por la noche, preparando unos badges a las 2 de la mañana con el pobre Pancho para que la gente supiese quién era. Amanecimos a las 7 de la mañana con apenas 4h de sueño a nuestra espalda  y partimos hacia Alcalá para quedar con el primer grupo del Círculo de Isengard. Comenzó entonces un trayecto de tren desde Alcalá hasta Alcorcón. Una vez allí, dando un gigantesco rodeo y desesperados por no saber si llegábamos o no ni si nos habíamos perdido, ví la luz al final del túnel. Se nos cruzó un tío que portaba la Caja Azul de la Marca, así que decidimos seguirle (cual fué mi sorpresa cuando me enteré de que habíamos estado siguiendo a Steinkel). Una vez allí, cola para coger número de participantes, cola para inscribirse a actividades del sábado y luego a descargar material para vender en el mercadillo (que me vino de puta madre para hacer espacio en mi almacén-habitación y deshacerme de algunas novelas y juegos que solo cogían polvo).

Estais en el desierto de Visirtán

La mañana del sábado la pasé jugando una partida de La Marca del Este, dirigida por Pedro Gil (Steinkel), se trataba de una aventura clásica de D&D, de la Serie B, llamada "La Ciudad Perdida" adaptado al mundo de La Marca. La verdad es que en algún momento nos pasamos de precavidos, pero gracias a eso llegamos con vida hasta el final de la sesión, aunque, por desgracia, no pudimos completarlo, ya que el querer es un hecho y el tiempo una condición... La partida tampoco estuvo exenta de momentos bastante memorables, como mi enano "Haciendo puenting" para matar unos escarabajos, el clásico momento Indiana Jones haciendo antorchas con huesos, ese mago que lo más que podía hacer era detectar magia y hacer levitar cosas o el mediano que no se creía que siguiese con vida tras abrir una puerta.

Pancho en Hunted House

Por su parte, Pancho estuvo jugando una partida de Hunted House (con el que se quiere lanzar en sus primeros pasitos dirigiendo) y que, por casualidades de la vida, resulta que el máster de aquella partida era un antiguo compañero mío del colegio (y teniendo en cuenta que vivo más allá del lejano Harad... fué toda una sorpresa encontrarlo aquí).

Después de una mañana agotadora, varios del Círculo de Isengard salimos en busca de alimento. De todas las posibilidades que había, Sam, Pancho y yo nos decantamos por ir en busca de una pizzería que resultó estar a tomar por saco. Al final comimos tirados en el parque que había frente al polideportivo donde se celebravan las LES e hicimos un recuento de las cosas que habíamos ido haciendo por la mañana. Finalmente, y tras decidir que habíamos terminado la comida cuando Samino tiró despectivamente el último trozo de su pizza, nos volvimos al evento, no sin antes enterarnos de que en el Círculo tenemos a una de las traductoras del Final Fantasy VII...
De nuevo en las LES, y aprovechando que había tiempo hasta las 17h que tenía mi partida de Omertà y Pancho la de Exo, decidimos hacer algunas entrevistas para el blog, primero fue a Ismael de Felipe, coordinador de Holocubierta, y después a Steinkel. Ahora mismo ando montando el vídeo, así que espero poder colgarlas en breve.

Premio al Juego de rol del año

Una vez acabado el trabajo periodístico, comenzó la partida de Omertà, mi personaje era Jeff, el jefe de la banda que llevábamos. Pertenecíamos a la familia Masseria, y, una vez citados por Lucky Luciano, debíamos seguir a su chica y enterarnos de si se veía con otro. La partida fue una sucesión de despropósitos por parte de los jugadores, entre ellas, la más notable podría ser que reventamos el coche de Lucky (y cuando digo reventar me refiero a romper la ventanilla, robarle una pipa, rajarle las ruedas y forzar la cerradura del maletero) ¡¡¡y logramos salir con vida!!! (aunque ahora mi personaje se jugaba las pelotas después de aquello...); otra cagada por nuestra parte fu dejar a "Hoyuelos" el nuevo del grupo, actuar solo y dejar medio tirados a la banda, así que mi personaje le hizo una breve visita a su apartamento con un bate de béisbol. Al final, tras varios intentos fallidos de seguir a la novia de Luciano, nos enteramos de que estaba saliendo con un hombre de Maranzano. Un paquete con los restos del hoyuelo de "Hoyuelos" nos lanzó de cabeza a visitar en plena noche al tipo, dejarle inconsciente y llevarlo cerca del río. Al final, tuvimos que ser muy "convincentes" para que cantara... Lo que queda de él está alimentando a los peces y sus huevos se los regalamos a Maranzano.
La partida fue bastante buena, no en vano ha sido Omertà el premiado a mejor juego de rol. El máster, Juan Emilio, también lo hizo genial, siendo sus mejores interpretaciones los cabreos de Lucky. Tenía muchas ganas de probar el juego al otro lado de la pantalla, ya que solo he podido dirigir la campaña de "Por los Viejos Tiempos" con la gente del círculo y andamos pendientes de empezar el segundo módulo de ésta.

Por el otro lado, habíamos dejado a Pancho, a Rubén y a Félix con su aventura de ciencia ficción con Exo. Después de su sesión, no hacían otra cosa que elogiar al sistema y a la extensa ambientación. Al parecer es un sistema muy rápido y completamente distinto de los que yo les suelo dirigir (muchos conocéis mi amor por el BRP). Tengo algunos manuales de Exo en proceso de lectura y espero poder dirigir algo este año. Por suerte también tuve la oportunidad de hablar con Juan Carlos Herrero, autor de Exo o Comandos y encargado de Ediciones Sombra, que me pudo explicar un poco el sistema y me comentó algunas novedades como el suplemento INMO para EXO o el España 1936 para comandos.

Después de las partidas, y tras hacer algunas compras de última hora, pillamos de nuevo el tren camino de Alcalá, todos baldados y con buen sabor de boca.

El domingo se nos hizo más tranquilo, el plan de viaje era el mismo salvo que solo íbamos Pancho y Yo;  los dos Rubenes, Félix y Samino se quedaron en tierra, aunque una vez allí nos reunimos con Alexia, Juan, Quinito, Marta y Rocío.
El planing iba a ser parecido al del día anterior: Rol por la mañana y por la tarde, y alguna entrevista después de comer, pero al final solo pudimos estar en una partida.

Ismael mandándonos "yonkis"

En mi caso, fui a la partida de ZCorps que dirigía Ismael, aunque hice la reseña no pude probar el sistema, así que me vino bastante bien. Un punto muy fuerte fue que hicimos las fichas, así que prácticamente aprendimos todo el sistema de juego (un sistema de rol se juzga por su ficha de personaje). Llevaría un estudiante universitario que para poder pagar la carrera trabaja de cartero, un personaje bastante normalito con muchas habilidades de orientación e interacción social, el resto de personajes eran no menos pintorescos, había otro estudiante universitario, un vendedor de seguros Mormón que hacía campaña por Obama, un Profesor de medicina que lo hacía por Romney y un periodista de deportes de riesgo un tanto fantasmón. Jugamos el módulo que viene en el manual para personajes supervivientes: "¡Abierto toda la noche!" y de vez en cuando Ismael nos comentaba situaciones con otros grupos (llevaba todo el verano dirigiendo ese módulo), con lo que me servía para analizar un poco más las posibilidades del juego. En conclusión: un juego sencillo, con una creación de personajes muy ágil y bastante currado. Incluso se podría iniciar a gente con el ZCorps.

Una vez terminada mi partida y Pancho la suya de Omertà fuimos todos a Comer. Quinito había ganado el Torneo de Catán y Juan había quedado segundo en el The Island. Nos dejamos caer en un chino donde se nos echó el tiempo encima.

La partida de Star Wars a la que nos habíamos apuntado Pancho y yo empezaba a las 16:30 y llegamos bastante tarde, así que optamos por una alternativa: Cacería de Bichos. Pero estaba visto que nuestro destino era no jugar el domingo por la tarde, ya que la máster del CdB no se presentó (era un castigo del Kharma por haber faltado a la nuestra de SW). El resto tenían a las 18:30 un torneo de King of Tokio, así que, para matar el tiempo, nos pusimos a jugar a un Cash'n'Guns y luego a un Catán. Después de ésto, y ya sobre las 18h, los dos decidimos que las jornadas acababan ahí para nosotros, estábamos hechos polvo, nos dolía todo y teníamos el sueño acumulado de todo el finde (y había algo que empezaba a incubar en mi interior).
Una vez llegamos al coche, y tras una laaaaaarga conversación en el tren sobre cómo mejorar las entrevistas y las videoreseñas para Aker, decidimos pasar por el Saturn para ver grabadoras y trípodes... Al final me pillé un trípode bastante majo y la grabadora queda para navidades XP

Héctor con su stand de GenX

Ya en madrid, directo a la cama, el lunes iba a ser también otro día a tener en cuenta porque era mi primer día en historia...

Y vaya día... con fiebre, malestar general y dolor de cabeza... y encima me confundo de aula (fui a la B-012, cuando debía ir a la B-12)... llegué a casa a las 20h y directo a la cama... Escribo esto con fiebre y dolor de cabeza... pero mereció la pena.

Salud y Rol